Add Listing Pide cita

Cómo evitar que un gato arañe el sofá

Los gatos son, por lo general, mascotas de bajo mantenimiento, Sin embargo, no todos los aspectos de tener un gato son fáciles. Como ocurre con cualquier animal de compañía, al adoptarlo se asumen muchas responsabilidades. Entre ellas, darles ejercicio, alimentarlos y cepillarlos. También hay que trabajar con ellos en los problemas de comportamiento que tengan. Uno de los comportamientos más destructivos e irritantes que puede tener un gato es cuando utiliza sus afiladas garritas para arañar tus muebles. ¿Cómo evitar que un gato arañe el sofá?

Los gatos y su costumbre de arañar

Los gatos son rascadores naturales. Es esencial entender que no estás tratando de entrenar su instinto de arañar, sólo quieres redirigir su atención lejos de los muebles.

En la naturaleza, necesitan rascarse para hacerse una manicura natural, eliminar la capa muerta de sus garras y mantenerlas afiladas. Los gatos domésticos no tienen las mismas necesidades, así que ¿por qué les sigue interesando rascarse?

¿Debo quitarle las uñas a mi gato?

La solución fácil para muchos propietarios ha sido quitarle las uñas a sus gatos. Así, literalmente, no pueden arañar el sofá.

Sin embargo, quitarle las uñas a un gato es un procedimiento doloroso y puede presentar muchos problemas futuros para tu gato y para ti.

Aunque quitarle las uñas o no sigue siendo tu elección como propietario, hay otros métodos que puedes utilizar si quieres entrenar a tu gato para que no arañe el sofá y otros muebles.

Métodos para evitar que un gato arañe el sofá y otros muebles

Comenzamos con algunos métodos y diferentes tipos de productos que la gente suele utilizar en el proceso de adiestramiento. A menudo, éstos sólo son necesarios durante el entrenamiento. Una vez que el gato aprenda hacia dónde dirigir sus arañazos, no tendrás que preocuparse de envolver o rociar continuamente sus muebles.

1. Cinta antiarañazos.

La cinta antiarañazos es útil para hacer que los muebles no sean atractivos para el gato. Los felinos son sensibles a las texturas, especialmente en sus patas. A los gatos les gusta arañar. Lo hacen en parte porque se siente bien.

Recuerde que todos los gatos son diferentes. Algunos odian la sensación de la cinta, mientras que a otros no les importa. Por suerte, es una pequeña inversión que hay que hacer aunque la prueba no vaya idealmente.

2. Ponerles calcetines o tapones de uñas en las patas.

En lugar de quitarle las uñas por completo, puedes proteger tus muebles quitándoles el brillo temporalmente. Las fundas para uñas cubren sus afiladas uñas y las embotan de forma efectiva. Pueden seguir usando sus uñas, pero no serán destructivas.

Las fundas para las uñas son excelentes mientras trabajas en el proceso de adiestramiento porque disminuye el riesgo de que le pase algo a tu sofá mientras tú y tu gato trabajáis.

3. Spray para arañazos de gato.

Una forma de conseguir que tu gato evite los muebles es utilizar un spray para arañazos de gato. Rociarlo en un área les ayudará a limitar sus arañazos destructivos o hacer que quieran evitar ese mueble.

4. Paneles de vinilo.

Protege directamente tu sofá instalando temporalmente paneles de vinilo que cubran los lados del mueble. Ponerlos alrededor de los muebles no se verá muy bien, pero sólo tendrás que hacerlo mientras entrenas a tu gato.

5. Otras opciones.

Los postes de rascado son las alternativas más comunes que la gente da a sus gatos y son esenciales para su entrenamiento.

Cómo evitar que un gato arañe los muebles

Siempre que entrenes un comportamiento en una de tus mascotas, debes tener paciencia.

1. Compra el poste rascador adecuado.

Comience el proceso comprando un poste rascador. Si puedes, intenta encontrar uno que imite la tela de su zona favorita para rascar. Ya sabe que le gusta esa textura, así que es menos arriesgado.

2. Coloca el poste rascador de forma estratégica.

El siguiente paso es colocar el rascador en el lugar adecuado para que resulte atractivo para su animal. Elije un lugar en el que a tu gato le guste estar.

3. Haz que los muebles sean temporalmente poco atractivos.

El siguiente paso es hacer que el sofá sea poco atractivo para ellos. Utiliza cinta adhesiva para gatos, spray o un forro de vinilo para hacerlo poco atractivo.

4. Fomente el interés por el poste de rascado.

Una vez que hayas hecho que su área de rascado principal no sea atractiva, consigue que el poste de rascado sea lo más emocionante posible. Puedes espolvorearlo con hierba gatera o utilizar sus juguetes favoritos para dirigirlos hacia el poste.

Cuando por fin se haga amigo del poste, podrás sentarse y relajarte. Sin embargo, no dejes que el poste se vuelva demasiado raído, o no querrá seguir usándolo. Lo mejor es sustituir el poste por el mismo producto, para no poner a prueba su tolerancia a la textura.