Las peleas entre gatos muchas veces conllevan lesiones en los ojos y párpados. Estas lesiones hay que tratarlas de manera especial pues las uñas de los gatos tienen una carga bacteriana fuerte, con lo que son heridas que fácilmente se infectan.
En este caso, este gatito, tras una pelea. se atendió por una úlcera corneal por el arañazo y también por un desgarro del tercer párpado, tal y como se aprecia en la foto.
El tercer párpado, o lo que es lo mismo la membrana nictitante, está situado debajo del párpado inferior.Es una estructura del ojo que protege al ojo, distribuye la película lagrimal por la superficie corneal cada vez que abre y cierra el ojo, también tiene funciones de producción de lágrima (produce el 30% del total de la lágrima que se produce en el ojo) y por último contiene folículos linfoides que ayudan a proteger mejor al ojo de infecciones.
El hecho de que esta estructura esté dañada produce grandes molestias en el ojo, por lo que es interesante reparar este daño, pero no de cualquier manera. Utilizamos para ello microcirugía con suturas de grosor menor que un cabello humano. Esto se hace así porque anatómicamente tiene que quedar perfecto, de lo contrario le molestaría al abrir y cerrar el ojo.
En último lugar, tras la cirugía, valoramos que el tercer párpado se comporte como lo hacía antes de la agresión, que cuando abra el ojo permanezca escondido y cuando lo cierra suba hacia arriba. El gato tiene que llevar collar isabelino (una protección en la cabeza) para que no se rasque el ojo durante 10 días.
Los puntos que utilizamos son reabsorbibles, por lo que ya no tenemos que dormir más al gato, sólo lo revisaremos hasta las dos semanas después de la cirugía.