Acude a nuestra consulta de exóticos un yaco de cola roja (Psittacus erithacus) en estado letárgico. Era incapaz de sostenerse en pie y su condición corporal era bastante deficiente. Llevaba 8 años con la familia y se sorprendían que de la noche a la mañana hubiera dado este cambio tan repentino. Hablando con ellos, nos contaron que la mañana anterior le habían dado un trozo de aguacate. Nos alarmamos por la gravedad del asunto, ya que el aguacate es muy tóxico para las aves desde canarios y periquitos, hasta aves grandes.
El consumo de aguacate, incluso la corteza del árbol, las hojas o la piel, contienen una toxina fungicida llamada “persina”. Las aves son particularmente sensibles a esta toxina, causando insuficiencia cardiaca (aumenta el ritmo cardíaco, produce daño tisular miocárdico), respiración dificultosa, plumaje desordenado, malestar, debilidad, apatía y pérdida de peso. Los signos clínicos comienzan a las 12horas post infección con sintomatología respiratoria y suelen fallecer a los 2-3 días.
No existe ningún tratamiento específico para este problema, además de la gran mortalidad tras la ingestión de esta toxina.
En este caso, tras un tratamiento sintomatológico riguroso durante varios días consiguió mejorar bastante.
